Correlimos canelo (Buff-breasted Sandpiper)
El Correlimos canelo (Tryngites subruficollis) cría en el más extremo ártico de Canadá y Alaska así como en la punta más oriental de Rusia (Península de Chukotskiy). Migra larga distancia para pasar el invierno en el N.E. de Argentina, Uruguay, Paraguay, sur de Brasil y una punta de Bolivia. Sin embargo, a pesar de haber visitado tanto sus zonas de cría en Alaska (Barrow) como de invernada (en la provincia de Buenos Aires) no conseguí dar con él. Pero, hacia finales del verano pasado (2013), aparecieron dos ejemplares en el Delta del Ebro (Tarragona) a 160 kmts. de mi casa… Ironías del destino. De hecho, es una especie que cada año se reporta en la Península Ibérica ya que un puñado de aves, “secuestradas” por las tormentas, acaban al otro lado del Océano Atlántico. Se trata de una limícola de tamaño mediano (18 a 20 cmts. de punta de pico a punta de cola) que nidifica en tundras arenosas y herbosas pero pasa el invierno boreal (verano austral) en cualquier terreno de hierba muy corta, incluidos campos de golf, aeropuertos y pastos. Machos y hembras presentan idéntico aspecto y se alimentan básicamente de invertebrados (desde larvas de mosca a copépodos pasando por pequeños coleópteros) y de algunas semillas. La foto, al limite de lo que se podría admitir por nitidez y nula composición, la justifico porque se trata de un ave poco vista (al menos en la mayor parte del planeta). Está tomada desde el coche en una explotación de césped.
Cámara Nikon D300 con objetivo Sigma 50-500mms. f:4.0 - 6.3, apoyado en ventanilla de automóvil.
Iso:200
Exposición (v):1/200 de segundo
Apertura (f):9
marta Liber