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Mochuelo boreal (Boreal Owl)

Me satisface anunciar que, con esta foto, dejo ilustradas en FotoRed las ocho especies de rapaces nocturnas que pueden verse en España donde, de lejos, el Mochuelo boreal es la más escasa pues solo habita en algunos bosques pirenáicos y se calcula que, en ese enorme territorio, existen menos de 230 ejemplares. Parece que los machos son bastante más numerosos que las hembras, así que cada año criarían menos de 100 parejas, quizá menos de 80. No solo es una de las aves más difíciles de hallar; a su favor existe un silencio bastante efectivo sobre la ubicación de los nidos, silencio aun más estricto que el que protege al Urogallo común. Por eso son much@s l@s ornitólog@s que nunca han visto esta especie. Yo mismo tardé diecisiete años (¡17!) en gozar de semejante privilegio; todavía se me corta el aliento al recordar el instante en que asomó ante mi cámara. Por cierto que, en vivo y en directo, solo le he visto la cabeza, pues no salió de su agujero. El Mochuelo boreal quedó aislado en los Pirineos cuando se retiraron los hielos de la última glaciación, estableciéndose así la segunda población más meridional del mundo (la más sureña está en el N.O. de la India). Por lo demás, su área de distribución abarca los bosques centroeuropeos y, a nivel mundial, las masas forestales subárticas tanto de Eurasia como de Alaska, Canadá y N.O. de E.E.U.U. Macho y hembra presentan idéntico aspecto, aunque ella es algo más grande; 25 a 28 cm frente a los 21 a 25 cm del macho (de punta de pico a punta de cola, se entiende). Se alimenta de pequeños mamíferos, principalmente roedores, insectos grandes y aves paseriformes. El Mochuelo boreal evolucionó para optimizar la localización de presas terrestres desde un oteadero, de noche y en el interior del bosque. Su cráneo presenta una marcada asimetría; la diferente ubicación de cada oído permite ubicar con alta precisión las ínfimas fuentes de sonido que delatan, por ejemplo, a un topillo que excava bajo la nieve.
Cámara Nikon D7100 con objetivo Sigma 50-500 mms. f; 4.0-6.3, trípode, cable disparador y espejo arriba. Iso:100 Exposición (v):1/40 de segundo. Apertura (f):7.1

Salvador Solé Soriano

En fotored desde 22/10/2011

Ficha personal
  • A mi, lo que me satisface es la originalidad de la toma y su gran calidad. Chapeau, un fotón del 15 como poco
    • Salvador Solé Soriano :hace 7 años Solo una de cada cuatro veces (y quizá exagero) consigo subir una foto de ave que vaya un poco más allá del documento correctamente ejecutado. Por eso me alegro que de que te guste esta toma, al margen del rollo ornitológico que tenga detrás. Gracias, Txema.
  • La explicación es muy didáctica y lo de la asimetría me ha dejado alucinado. Entiendo la emoción que sentiste al encontrarlo después de 17 años de búsqueda. Entiendo que debe ser como  "el santo grial", si se me permite la comparación, de las rapaces nocturnas españolas. La calidad de la fotografía es simplemente espectacular y si además, a ello unimos la singularidad de la captura, estamos hablando, no un fotón, si no de un RE-FO-TÓN
    • Salvador Solé Soriano :hace 7 años En efecto, al Mochuelo boreal le cuadra bien la descripción de Santo Grial de las rapaces nocturnas ibéricas. Gracias por tu amable comentario, Miguel Ángel; es un gustazo ver que aprecias esta imagen en sus diversas dimensiones.