Un retrato mucho más sutil que los abiertamente eróticos pues has utilizado el entorno para dar pistas sobre el carácter del sujeto, que no las da con su aspecto pero consigues que la foto haga un guiño a quien sepa de qué va la cosa. El kitsch floral contrasta con la corrección de la indumentaria (¿laboral?) y crea un contraste simpático y conceptualmente elegante. Bueno, es solo mi opinión, claro.
Salvador Solé Soriano