Diáfana imagen con los frescos azules de la roca a juego con el cielo (de ahí le viene el color) y todos los elementos situados con cariño en el encuadre. Destacaría que la forma del pino es muy similar a la de la masa montañosa de su derecha y que ese tipo de sutilezas dotan de gran consistencia a la fotografía. ¡De rechupete!
david Pérez Hens