¡Pues muy bien hecho, haberle sacado una foto! Imágenes como ésta, aunque no sean la mejor toma de tu vida, ganan en valor sentimental conforme pasan los años y vale la pena atesorarlas. Además, se advierten otros detalles del entorno que seguro que también irán cambiando a lo largo del tiempo.
Salvador Solé Soriano