Un bellísimo rincón en cualquier época del año, un lugar casi secreto del que creo que ya os he mostrado alguna otra. Aquí en un invierno bastante duro, con más de diez grados bajo cero
Pues poco hielo se ve para tan baja temperatura. Un lugar de ensueño captado con tu habitual buen ojo y fina edición. Los hilillos de agua del extremo izquierdo del encuadre son una birguería y la composición, al dente.
Salvador Solé Soriano