luces del norte III
Después de la euforia del primer dia de auroras, pensé que no era tan difícil volver a repetir la experiencia. Al fin y al cabo, se presentaron sin demasiado esfuerzo, justo al acabar de cenar, sin madrugones ni noches en vela. Sin embargo, al dia siguiente, cuando tenía todo el material fotográfico mucho más preparado, no aparecieron. Al menos no en los momentos en que me iba despertando.
Dos días después, volvieron a iluminar la noche noruega, en el pueblo de Reine. Con la experiencia de Eggum, quise acercarme en lo posible a algunas fotos que había visto en internet, aportando un plus de “vida terrestre” a las tomas. Me situé al otro lado de la bahía de Reine, en dirección norte –obviamente-, con las luces del pueblo bien presentes. Casi a la misma hora que el primer dia, aparecieron, majestuosas, las ansiadas auroras.
Esta vez fui corrigiendo sobre la marcha la inclinación del horizonte. Por otra parte, la deformación angular es muy destacada, haciendo imposible su corrección en el ordenador, aun cortando gran parte del cielo por arriba.
En la siguiente oportunidad que tenga –si la tengo- intentaré situarme más lejos y no usar un objetivo tan angular, con el fin de no deformar la perspectiva, siempre que quiera que aparezcan construcciones o edificaciones, como en este caso.
Intentar, como he visto en algunas fotos profesionales, iluminar correctamente un primer plano, como alguna montaña o árbol, resulta complicado para mí. Habría que estar muy seguro de por dónde van a aparecer las auroras y prepararlo todo. En mi caso estaba desbordado por la situación y no hacía más que mover continuamente la rótula a medida que iban surgiendo las luces en el cielo. El fenómeno duró algo más de una hora. Supongo que, si uno prepara el viaje exclusivamente para captar todo esto, el resultado puede ser muy diferente. Pero éste no creo que sea nunca mi caso.
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Cámara:Canon
Modelo:Canon EOS 6D
Iso:1600
Exposición (v):6 segundos
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Samyang 14mm 2.8 manual
Salvador Solé Soriano