Esto pobre macho, se tiró algunas horas guardando el borde de la piscina en busca de su esperada hembra.
Posición de obelisco, para reducir el calor del sol de mediodía.
Motril /Granada.
El contraste entre rojo y azul y esa diagonal tan portuna son las bondades más evidentes de la toma pero me quedo con la sombra de las alas, detalle más sutil y menos habitual.
Salvador Solé Soriano