Boyeria irene
Esto para mí no es una foto de una libélula más.
Esta especie, con un extraño nombre científico (Boyeria irene), es muy abundante en mi pueblo. En verano pueden verse bastantes ejemplares patrullando sin descanso los márgenes del río. Y digo sin descanso porque llevaba varios años detrás de estos animales y nunca había visto ninguno de ellos posado, ni siquiera de lejos. Además tienen un vuelo muy rápido y enérgico y es prácticamente imposible cazarlos en el aire. En mi mitología personal, este insecto llegó a convertirse en un ser mágico e inalcanzable que nunca paraba de volar como si en ello le fuera la vida (y probablemente así sea).
Pues bien, en el día de la foto, parece ser que los dioses estaban de mi parte y, de forma inesperada, se me plantó este caballero a unos metros de mí durante unos pocos segundos y esto es lo que pude hacer. Salud!
A pulso (acelerado).
Salvador Solé Soriano