Cielo de abril
En el Alto Ampurdam una vez conocí a un pintor alemán de nubes. Había comprado una torre, le puso una bóveda de metacrilato transparente, y allí pasaba horas intentando captar la belleza de esas formas proteicas con las que distraía sus liberales ocios el Extraño de Baudelaire... "Eh! qu'aimes-tu donc, extraordinaire étranger? -J'aime les nuages... les nuages qui passent... là-bas... là-bas... les merveilleux nuages!".
Ya sin cielo metafísico, a nosotros, que también pasamos, tal vez nos sea suficiente la contemplación de esta ilusión efímera de fondo azul.
Hacia nosotros, el horizonte se abría, elevaba y resplandecía, como las alas de los ángeles.
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Cámara:PENTAX
Modelo:PENTAX K200D
Iso:100
Exposición (v):1/500 segundos
Apertura (f):9.5
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Salvador Solé Soriano