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Hielo en roca

En este charco formado en el lecho de roca del río Ter, el hielo tiene formas caprichosas cuando es opaco y ha quedado transparente en el resto de la superficie, donde no había agua en estado líquido. A mis ojos, la propia forma del charco armoniza con la estructura de las manchas de hielo opaco. Para esta foto, he usado una edición “bicroma” (dos tonos monocromos) que poco se aleja de la imagen real. Todavía me quedan un par de este tema.
Cámara Nikon D300 con objetivo Nikon DX 18-105 mms. f: 3.5. - 5.6, a pulso. Iso:250 Exposición (v):1/50 de segundo. Apertura (f):8

Salvador Solé Soriano

En fotored desde 22/10/2011

Ficha personal
  • El aspecto queda como de mineral de una joya natural. Casi arqueológica. Muy buena
    • Salvador Solé Soriano :hace 6 años Gracias, Miguel Angel. Es un placer compartir gustos como este, que no es lo mismo que un salvapantallas de Windows...
  • Gran mirada, gran foto, texturas, composición y es bicromo, perfecto. Me encanta
    • Salvador Solé Soriano :hace 6 años Gracias, Lucas. Los sitios y los motivos chulos facilitan la labor del fotógrafo, como bien sabes...
  • hace 6 años
    Luis Ruiz
    Pues es cierto que los días de grandes heladas solo hay que darse un paseo por el campo para ver multitud de caprichos helados. Es increíble la cantidad de formas y aspectos que es capaz de desarrollar el agua cuando se hiela lentamente, formando cristales, láminas, bloques y un largo etcétera de caprichos a cuál más sorprendente. Incluso en el ámbito del macro hay muchas posibilidades al sacar a relucir las formas más diminutas de cristales que suelen ser, a la vez, las más sorprendentes. En fin, habrá que aprovecharse de este clima gélido porque luego vienen julio y agosto para recordarnos que el infierno existe, je, je. Por cierto, curiosa foto con esa mezcla de piedra y hielo que hasta parecen llevarse bien. Un saludo. 
    • Salvador Solé Soriano :hace 6 años En efecto, hay que tener en cuenta las grandes heladas porque son un filón fotográfico apenas explorado y resultan más frecuentes que las grandes nevadas. Las nieblas también pueden proporcionar buen material. Y es que no hay excusa para no salir al campo, salvo la más eshpañola[/i] (catalana también, ojo) y consagrada de las excusas; [i]no tengo tiempo.