Impecable toma con una composición muy dinámica dominada por las dos diagonales (línea superior de las alas y tallo de la flor). Aunque mariposa y fondo son de tonos similares, la diferencia de enfoque resulta suficiente para resaltar al sujeto. El toque de color de contraste (la flor) y la gran nitidez son dos virtudes que terminan de redondear el conjunto. Es un buen ejemplo de que se pueden hacer muy buenas fotos con elementos y protagonistas sencillos e incluso discretos.
Este macho está colosal.... ciertamente la única que se me ha puesto en sitio libre de espinas, ha conseguido que mi decrépita cabeza se haya olvidado de que en la cámara tengo un botón para previsualizar la profundidad de campo... y menuda faena de fóto... que te voy a contar que no hayas vivido....
Salvador Solé Soriano